viernes, 27 de octubre de 2017

¿QUIÉN QUIERE LUZ?




Donde no hay luz jamás habrá verdad.

Donde la verdad esté ausente 
y la insensatez siga presente, 
cualquier color que esté presente
a mi voz la mantendrá ausente

Donde no hay luz jamás habrá verdad


Juan Aranda



Cuando se baja a las entrañas de la Tierra encontramos ambientes -muy obscuros- donde nadie se justifica ni se compromete porque, al no haber luz, es imposible firmar un acuerdo de mínimos y, al salir a la superficie, todo el mundo habla de lo que pasó allí "adentro" y nadie reconocerá su voz.

Hubiese sido lógico que alguien llevase la luz, en forma de palabra, para iluminar a quienes sentían la presencia de la obscuridad y la realidad se hubiese hecho visible, para luego haber podido hablar de ella y de sus protagonistas verdaderos.

Otros, quizás, hubiesen acercado una luz -presente en los gestos- con lo que las actitudes hubiesen aprendido de las almas propositivas y, aunque no se copiasen las herramientas para vivir "a obscuras", hubiésemos estado liderados por un "primer paso" para encontrar la puerta de salida y luego propiciar un abrazo de reencuentro, tan necesario allí abajo y tan verdadero a la luz de los menesteres más elementales.

Algunos, es posible, que fuesen por una vela y con la emblemática imagen de una lágrima suspendida en la cera, hubieran podido ver los claro-obscuros propios en todo ambiente desconocido, para posicionar las miradas y mantener equidistantes los propósitos.

Pudiera haber tenido cabida quien se acercase con candelabro, a la vieja usanza, reflejando en el cobre sus intenciones y en sus múltiples ojos encendidos la predisposición innata a discutir sobre la limpieza de la luz, allá afuera, frente a la quimera de una luz inexistente, aquí abajo.

Y sería un buen propósito, quizás arcaico pero oportuno, cargar leña y encender fuego a través del frotamiento más primitivo, para que a la luz de la hoguera se hubiesen podido discutir los elementos de verdad que llenan las páginas de los pequeños acuerdos, detrás de los que siempre habrá grandes esfuerzos por ceder para ganar y por comprender para construir.

A pesar de todo, lo ideal hubiese sido que alguien hubiese abierto "una rejilla de luz", el mínimo permisible para darse cuenta que hay vida más allá de las sombras y que por esa mirilla hubiéramos podido adivinar los abrazos de reencuentro de quienes confiaron en que no nos íbamos a perder en la obscuridad.

Alguien debería haber dicho que es necesaria la luz, aunque nadie la pidiera, porque lo que quedará para la historia no quedará en la obscuridad y los tropiezos siempre serán menos probables, el aplauso apagaría la luz de las velas encendidas y la luz del día nos hablaría de que nada fue secreto "allá abajo"

Tu amigo, que nunca te falla



JUAN

miércoles, 4 de octubre de 2017

LAS PREPOSICIONES DAN MIEDO


¿Qué hacer cuando nos enfrentamos A una catástrofe que no se había anunciado y comprobamos el sufrimiento DE un pueblo que se retuerce de interrogantes?

¿Qué actitud tomar ANTE el castigo de unos padres que no están BAJO observación y nunca aprendieron la mejor manera DE educar a sus hijos?

¿DESDE dónde vienen los lamentos de niños CON hambre que nadie escucha?

¿CONTRA quién habrá que luchar para que los problemas sigan su curso SIN encontrar víctimas inocentes?

¿HACIA qué punto debemos dirigirnos cuando estamos perdidos?

¿POR qué razón no se llega a un acuerdo por los líderes internacionales si está en juego la paz mundial?

¿CABE detenerse un rato para pensar en mis verdaderas actitudes?

¿DE qué valores estamos hablando si quienes tienen que dar ejemplo se refugian en sus impulsos?

¿EN qué sociedad se ahorran los gestos por miedo a que se copien?

¿ENTRE cuáles alternativas discurre la posibilidad de diálogo para solucionar una temática concreta?

¿HASTA cuándo existirán las diferencias entre grupos sociales?

¿Merece la pena seguir intentándolo PARA que sigan coartando la libertad de tus esfuerzos?

¿Hay tantos sinsentidos o se puntuarán SEGÚN su procedencia?

¿Es probable que se pueda opinar SIN antes haber leído?

¿Será factible acceder a un diálogo sin querer estar SOBRE el planteamiento del otro?

¿Se puede ir siempre TRAS los sueños?


Tu amigo, que nunca te falla




JUAN